Las semillas de lino son ricas en ácidos grasos esenciales omega 3, por lo que se recomienda incluirlas en dietas vegetarianas y durante el embarazo y la lactancia
¿Sabías que el aceite que contienen las semillas de lino es una de las principales fuentes vegetales de omega 3? Seguro que hay otras muchas cualidades beneficiosas de la linaza que desconoces o pasas por alto, así que a continuación vamos a enumerarlas una por una.
Propiedades
Hay alimentos que se ponen de moda para determinados fines y otros con propiedades tan numerosas que acaban sirviendo igual para un roto que para un descosido. Este es el caso de las semillas de lino, las cuales pasaban desapercibidas antes de hacerse famosas por su elevadísimo contenido en ácidos grasos poliinsaturados.
Entre las propiedades de la linaza destaca su alto aporte de fibra dietética útil para tratar el estreñimiento, lubricar la flora intestinal y saciar el apetito. Aunque se componen en mayor proporción por ácidos grasos esenciales, las semillas de lino también poseen proteínas, carbohidratos, mucílagos, vitamina E, vitaminas del complejo B y minerales tales como yodo, hierro, zinc, magnesio, calcio…
Expertos definen las semillas de lino como un alimento funcional por sus efectos benéficos sobre varias funciones del organismo y su capacidad de reducir el riesgo de padecer enfermedades. Los nutrientes que nos aportan dichas semillas ayudan a mantener el organismo depurado, a combatir la retención de líquidos y a regular el colesterol, los triglicéridos y la presión arterial. También contienen importantes cantidades de lignanos (fitoestrógenos naturales con acción anticancerígena) y componentes antibacterianos.
La linaza se utiliza como reguladora del tránsito intestinal, pero también para retrasar el envejecimiento de la piel y mejorar su aspecto y frenar la caída del cabello. La Asociación Americana de Dietética (ADA) recomienda incluir lino en las dietas vegetarianas como fuente de ácidos grasos omega 3, y resalta la importancia de consumirlo durante el embarazo y la lactancia para el correcto desarrollo nervioso del bebé.
¿Semillas de lino para adelgazar?
Es precisamente su alto contenido en fibra el que aporta ese efecto saciante que nos ayudará a controlar el apetito e ingerir así un menor número de calorías. No obstante, conviene recordar que las semillas tienen un alto porcentaje de calorías (alrededor de 540 calorías por cada 100 gramos), por lo que deben consumirse con moderación.
Contraindicaciones
Su alto contenido en fibra puede suponer un impedimento a la hora de tomar ciertosmedicamentos, ya que la fibra puede alterar la absorción de estos. Asimismo, en caso de diarrea aguda o crónica se desaconseja su toma, pues la fibra potenciaría todavía más el tránsito intestinal.
Por otra parte, aquellas personas afectadas de diabetes deben consultar con su médico si su ingesta está recomendada, puesto que el lino podría disminuir o alterar sus niveles de glucosa en sangre.
Cómo tomar las semillas de lino
Es aconsejable moler las semillas de lino con el fin de absorber mejor sus nutrientes antes de incorporarlas a panes, repostería casera, salsas, sopas, ensaladas o guisos. También se pueden añadir a zumos de frutas, batidos, yogures u otras bebidas e incluirlas en un desayuno nutritivo mezcladas con cereales.
fuente:
http://muyenforma.com/semillas-de-lino-propiedades-y-contraindicaciones.html
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